La categoría Segunda vivió su segundo capítulo del año como una verdadera película de suspenso y acción. Las seis parejas que componen la zona Norte llegaron el sábado hasta la ciudad de Rauch, para continuar dándole vida a una categoría que sigue creciendo. Siempre con el aliciente que significa la figura convocante de Eduardo Ross, que como en cada presentación, volvió a dar la talla y protagonizó dos partidos finales para el recuerdo. Y si bien esta vez no pudo quedarse con el título, la pareja de Comercio de San Pedro se las arregló para ser protagonista, con un Félix Armendaris como peón ideal del Rey.
La jornada arrancó con una puntualidad digna de imitar, y con un excelente clima entre todos los jugadores. Los partidos fueron de menos a más, con la sensación que los mejores se fueron guardando las fuerzas totales para el gran final. Que lo fue como se anuncia: un gran final. La pareja local de Boca de Rauch fue la gran sorpresa de la tarde, con un partido inolvidable en la semifinal. Esteban Machi y Luciano Lacorén estuvieron a punto (un punto en realidad), de dar el zarpazo ante los campeones de la primera fecha. Tras dos set parejos (uno para cada lado) llegaron al tie brike, donde todo parecía servido en bandeja para Rauch: un rápido 5-2 que los metía en la gran final, ante un público dividido en las preferencias. Apareció Eduardo, Féliz Armendariz inspirado, dos derechas cortas al final y 7/6 para los de San Pedro. Cerrado aplauso. Los nervios y la ansiedad chocaron contra la experiencia y el aplomo de la leyenda. Ross otra vez a la final.
En la otra semi no le fue en zaga a la primera. Dos set iguales (12/9) y una final apretada, donde los chicos de Atlético Adrogué hicieron pesar el físico. Fue 7/5 y a la final esperada.
José Jaurena y Pablo Sánchez venían entonados y trasladaron el buen momento a la final. Parecía que se llevaban el torneo tras el 12/9 del primer set y el cansancio y la espalda maltrecha de Ross. Entonces reapareció la magia del Rey y el ímpetu de Armendaris para emparejar con un impensado 3/12. Los chicos de Adrogué se metieron en el partido de su vida, y se pudieron quedar en el último suspiro que con 7/6 agónico. Las gradas ya más colmadas, agradecidas ante tanta buena pelota paleta.